La inversión en el Internet de las Cosas (IoT) alcanzará nada más ni nada menos que un crecimiento del 70% en 2020 respecto a 2017. La inversión actual en el Internet de las Cosas es de unos 13.500 millones de euros para todo el 2017 en España. Estos datos surgen de las previsiones hechas por la consultora tecnológica IDC.
Un crecimiento a escala mundial
El crecimiento en la inversión en el Internet de las Cosas no solo sucede en España, es una tendencia al alza en todo el mundo.
La inversión durante el 2016 en IoT, en todo el mundo, fue de 737.000 millones de dólares, un 17,9% más que el pasado curso. Hablamos de hardware, software, servicios y conectividad relacionada con el Internet de las Cosas.
Estos datos no hacen más que demostrar que el Internet de las Cosas (IoT) será una de las tecnologías más importantes en los próximos años y que revolucionarán el mercado de las Tecnologías de la Información (TI) a nivel mundial.
El Internet de las Cosas en la empresa
Es indudable con los datos que se manejan que el IoT (Internet of Things) extraídos de las encuestas realizadas a responsables de tecnología de toda Europa, muestran que una nueva era del Internet de las Cosas está en marcha.
Un 37% de las empresas europeas encuestadas ya trabajan con el Internet de las Cosas. Y en España, la cifra aumenta hasta el 39%, por detrás de otros países europeos como Alemania, Reino Unido, Francia e Italia. El 15% de las empresas españolas quiere implantar soluciones relacionadas con el IoT, tres puntos por encima de sus compañeros europeos.
Si hablamos por sectores, la industria manufacturera el IoT supone un 18% de participación, aunque para 2020 se espera que la cuota disminuya al 13%.
En cambio en el sector minorista el IoT no deja de crecer, se espera que en 2020 acumule un 14% total del gasto en España. ¿Dónde? En la experiencia del cliente en las tiendas y las soluciones omnicanal.
¿Por qué triunfa el Internet de las Cosas en la empresa española?
Los principales beneficios que ven las compañías españolas en el IoT son:
- la automatización de procesos (26%)
- la reducción de costes operacionales (24%)
- la mejora en la experiencia del cliente (23%)
Por otro lado, el adoptar tecnologías del Internet de las Cosas implica que en un 69% de las organizaciones se hayan planteado nuevas políticas de seguridad elaboradas específicamente para solucionar las necesidades relacionadas con esta nueva tecnología.
Los contras para las empresas al implantar estos avances son:
- los costes iniciales (29%)
- las preocupaciones relacionadas con la seguridad (25%)
- los problemas de privacidad (17%)
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