Ebriedad, botellón, intimidación, abuso verbal, daños medioambientales, vandalismo, el 90% de los españoles considera que el comportamiento antisocial y el vandalismo juvenil suponen un problema preocupante y en aumento en España. Así se desprende del “Estudio sobre Comportamiento antisocial y seguridad en hogares 2013” realizado por Tyco, que ya hemos comentado en varias ocasiones. Sin duda, el aumento del paro y los constantes mensajes negativos sobre la situación actual producen una sensación de inquietud y desánimo que se refleja en la percepción de inseguridad en el entorno en todos los aspectos.
Más de la mitad de los encuestados (52,6%) apunta al desempleo como la causa que repercute más negativamente en estos comportamientos vandálicos. De hecho, este condicionante ha aumentado notablemente en los últimos años. Hace 6 años, en 2006, sólo destacaba esta posible causa el 17% de los encuestados.
Al mismo tiempo, el estudio muestra que existe una mayor concienciación respecto a los actos vandálicos y la mayoría de los españoles se implicaría si fuera testigo de comportamientos antisociales. El 43% señala que probablemente intervendría y el 14% lo haría con toda seguridad si presenciara que un grupo de jóvenes está destrozando bienes públicos, tales como una marquesina de autobús o quemando papeleras. Más aún se implicarían si presenciaran cómo un grupo de jóvenes ataca a un adolescente. El 29,8% intervendría seguro y un 54,8% probablemente intervendría.
Los “puntos negros” del vandalismo
Los españoles vemos mayores problemas en los entornos habituales de nuestra vida del día a día -incluso centros educativos- por encima de otros que a priori podrían asociarse más con la inseguridad como por ejemplo, los lugares de atracción turística. Bares, pubs y discotecas, junto con lugares públicos y estadios deportivos lideran la lista de los espacios más inseguros.
Para el conjunto de los entrevistados, deben ser los padres los encargados de educar a los jóvenes para evitar el comportamiento antisocial, una opinión compartida por el 88.8% de los españoles. También señalamos como responsables a la policía, colegios y al Gobierno. Entre las medidas necesarias para reducir el comportamiento antisocial, la mayoría señala la necesidad de mejoras educativas (84,2%), junto con sentencias judiciales más severas (58,2%) y el fomento de la tolerancia cultural y étnica (40,8%).