Seguridad en internet: consejos para padres y niños

Siempre hemos pensado que los mayores peligros para los niños estaban en el exterior de la casa, pero ahora debemos saber que corren riesgos también sentados tranquilamente frente a un ordenador. Las nuevas generaciones han nacido entre telefonos móviles, internet y toda una serie de tecnologías que antes ni siquiera existían. Y por eso hay que tener especial cuidado. Porque con ellos han aparecido un serie de riesgos para su seguridad ante los que no estamos preparados: pueden acceder a páginas de contenido sexual, racista o violento, o facilitar datos y archivos que pueden ser utilizados de mala manera por otras personas. Pueden citarse con extraños que han conocido en un chat. O pueden ser acosados, amenazados, estafados…

Por eso lo primero que hay que hacer, si vosotros los padres no tenéis familiaridad con este mundo de Internet (aunque la mayoría ya estamos bastante al día al respecto) es informaros bien para saber de lo que se habla, y poder actuar correctamente con los niños. De otra manera, si tus hijos ven que ellos dominan el tema más que tú, no te harán caso. Ten en cuenta que ellos van con ventaja: han nacido en ese mundo. Que un padre no sepa del tema no es excusa para dejar que su hijo haga lo que quiera frente al ordenador. Por eso en el Blog de la Seguridad de ADT, después del post sobre el Día de la Seguridad Privada y las conclusiones del Jefe Superior de la Policía sobre la “nueva amenaza” de Internet, queremos compartir con vosotros una serie de consejos para poder manejar un poco mejor este tipo de situaciones.

Los deberes de los padres en cuanto a seguridad online

• Acompañar a vuestros hijos, disfrutando de la seguridad en Internet juntos, el máximo tiempo posible que pasen frente al ordenador. Y hay que tener respuestas preparadas para cualquier contenido inapropiado que pueda saltar, ya que nunca se sabe lo que puede aparecer por ahí mientras se navega. Mejor tener algo pensado y que no te pillen en un renuncio.

• Informarles de que en los chats es posible que se oculten personas malintencionadas tras una identidad falsa. Tal vez los chavales se reirán, pero no está de más recordárselo para que lo tengan presente. También hay que evitar que los niños utilicen nombres de usuario o nicks que revelen su nombre completo o sean provocativos.

• Los niños deberían acceder sólo a chats apropiados para su edad. No estaría mal que pasarais un tiempo viendo el ambiente y el lenguaje del chat en el que vuestro hijo quiere meterse.

• Igual que en el mundo real, hay que enseñar a los niños a que reconozcan cualquier comportamiento indebido y a comportarse ellos mismos. No insultar o enviar fotos inapropiadas, gastar bromas pesadas… Si no está bien en el mundo físico, no está bien tampoco en Internet.

• Hay que propiciar que os cuenten cualquier amenaza, intento de extorsión, coacción o proposición sexual que reciban. Es un tema delicado, pero hay que fomentar la confianza para que sean capaces de contarte estas cosas que pueden traer graves consecuencias.

• Recuerda a tus hijos que tienen que contar con vosotros para cualquier compra o venta por Internet (en caso de que tengan edad para ello). Evidentemente no se les puede dejar una tarjeta de crédito para que hagan lo que quieran en cualquier portal de Internet a sus anchas.

• Hacerles saber que no hay que dar información de teléfonos, domicilios, nombres o apellidos, datos personales y familiares a nadie, ni por internet ni por teléfono.

• Hay que evitar que se conviertan en unos obsesos de las redes sociales y cuelguen todo tipo de contenido que se les ocurra. Hay que tener cuidado con las fotos, por ejemplo que no den datos de más con ellas, como en una instantánea en la que lleven una camiseta con el nombre de su colegio o similar.

• Algo que funcionaba bastante bien antes para controlar el uso del ordenador era colocarlo en un lugar de tráfico de la casa, para evitar que se pase demasiado tiempo delante de él o poder ver a qué páginas acceden. Éste sigue siendo un buen método, pero ha perdido eficacia debido a la aparición de los portátiles y los móviles con Internet.

• Podéis pensar también en invertir en software de seguridad en internet con control parental, que limita los sites a los que pueden acceder los niños.

• Y nunca, por supuesto, hay que permitir que un niño conozca en persona a un extraño que ha conocido en la red.

Pero por último, y ante todo, ¡recordad que no se trata de prohibir, sino de guiar y educar!