Se acerca la Navidad y con ella, las comidas familiares y las cenas de empresa. Entre tantas celebraciones, debemos vigilar el consumo de alcohol y extremar las precauciones al volante, ya que conducir con alcohol es uno de los principales factores de riesgo en la carretera.
¿Por qué es peligroso conducir con alcohol?
El alcohol provoca graves alteraciones en el comportamiento y las capacidades físicas y psicológicas de una persona. Si una persona toma alcohol:
- Disminuye su sentido de la responsabilidad y de la prudencia.
- Infravalora los efectos que el alcohol tiene sobre su comportamiento: el típico “yo controlo”.
- Puede aumentar las conductas agresivas e impulsivas.
- Suele tener una falsa seguridad en sí mismo y sobrevalora sus capacidades, lo que le llevará a asumir mayores niveles de riesgo.
- Comete muchas más infracciones.
¿Cuáles son los efectos del alcohol?
Las alteraciones que el alcohol puede provocar en una persona dependen tanto del conductor como de su nivel de alcoholemia. Éstos son los efectos más comunes y peligrosos que produce el alcohol al volante:
# En la percepción
Bajo los efectos del alcohol, el conductor percibe peor las luces, las señales, las distancias y las velocidades. Además, sus ojos son más sensibles a los deslumbramientos y se fatigan con mayor facilidad.
# En la atención
Un conductor bebido tiene mucha más probabilidades de distraer su atención, especialmente si la conducción se prolonga en el tiempo.
# En la psicomotricidad
El alcohol provoca descoordinación, alteraciones en el equilibrio y movimientos menos precisos.
# En la toma de decisiones
Bajo los efectos del alcohol se cometen muchos más errores al volante y la toma de decisiones se vuelve más lenta.
5 falsas creencias sobre beber al volante
Existen una serie de tópicos y falsas creencias muy extendidas sobre el alcohol y la conducción. Estas presunciones pueden ser muy peligrosas al volante:
- “No hay peligro si estoy por debajo del límite legal”. Aunque tu tasa de alcoholemia esté por debajo del límite legal, el riesgo de accidente será mayor que si no has tomado nada de alcohol.
- “Nunca daré positivo si bebo poco a poco a lo largo del día”. Nuestro organismo tarda mucho tiempo en eliminar el alcohol. Consumir de forma gradual durante todo el día puede provocar una tasa de alcoholemia muy elevada.
- “Dos personas que beban lo mismo tendrán la misma alcoholemia”. Además de la cantidad de alcohol ingerida, hay muchos otros factores que intervienen, como la edad, el peso y las circunstancias personales.
- “El alcohol ingerido en la comida no se absorbe”. Beber alcohol con el estómago lleno puede retrasar la absorción del alcohol, pero el alcohol ingerido siempre termina por pasar a la sangre.
- “Un café, una cabezadita y como nuevo”. Ni el café, ni una ducha, ni dormir un poco son capaces reducir los niveles de alcohol.
Si sabes que tienes que conducir, solo hay una manera de evitar los peligros de conducir con alcohol: no beber. Y si además, tienes que hacer viajes de largo recorrido, ten en cuenta estas recomendaciones para viajar de forma segura en Navidad. Tu bienestar y el de tus seres queridos es el mejor regalo para estas Navidades.